La llegada de la ministra de las Culturas, las Artes y los Saberes, Patricia Ariza, poeta, dramaturga y defensora de los Derechos Humanos unió representantes de diferentes artistas, sabedores y gestores culturales, quienes llegaron hasta el palacio Echeverry con música, danzas y cantos para homenajear el inicio del Gobierno del Cambio.

 “Yo vengo del arte y sé lo que representa el arte. El arte es uno de los principales promotores de la sensibilidad y la libertad en la sociedad; también es el asunto político por excelencia al estar relacionado con la forma de ser, de pesar, de actuar y de decidir. Vamos a desatar toda la potencialidad humana. Será una sociedad de conocimiento, de creadores y creadoras”, expresó la ministra de las Culturas, las Artes y los Saberes, Patricia Ariza.

La llegada de Patricia Ariza es sinónimo de diálogo, de escucha y de co-creación, por esto de inmediato inició la agenda vinculante con los artistas y funcionarios del Ministerio para avanzar en los ejes de trabajo, enfocados principalmente en aspectos como la cultura de paz, la inclusión de las mujeres, los jóvenes y el trabajo desde y para las comunidades de las regiones, con el fin de fortalecer los lazos y extender el poder transformador del arte en el país.

“Quiero invitarles a todos los artistas del país a que nos manifestemos, a que expongamos nuestras necesidades, nuestros conocimientos, que es muy necesario, que el Ministerio, a través de la ministra, estará muy atenta a recogerlo. De esta manera podemos saber que todo nuestro quehacer y nuestro conocimiento artístico estará presente. Y de verdad podremos vivir sabroso como lo plantean y en disfrute de nuestros territorios”, afirmó el poeta proveniente de la familia indígena Camsá del sur de Colombia, Hugo Jamioy.

Nuestra ministra, también dio a conocer los principales ejes del plan de acción que enmarcará el Gobierno del Cambio 2022- 2024, dentro de los que se destaca el trabajo con las mujeres, los y las jóvenes y los y las artistas en las diferentes regiones.

Ejes de trabajo

El primer eje de trabajo presentado por la ministra es el trabajo por la Cultura de paz, otorgarle al cambio social la dimensión cultural y artística para transformar el imaginario e instalar nuevamente en los colombianos la cultura de paz y la necesidad de la paz para que sepamos vivir juntos.

La segunda apuesta está enfocada en el en el fortalecimiento de los procesos de formación artísticos y culturales de niños, niñas y jóvenes. El arte llegará a las aulas y a las comunidades para fortalecer las tradiciones y promover la transmisión de saberes ancestrales y de memoria en las nuevas generaciones.

Este objetivo también irá de la mano con el trabajo en las regiones y la inclusión de las mujeres, grupos étnicos y los jóvenes dentro del plan de gobierno. De esta manera lograremos verdadero cambio social y cultural.

“Lo que he escuchado esta mañana me llena de esperanza, creo que efectivamente la cultura es una herramienta de paz. El trabajo con las regiones, el trabajo de formación, que todos los niños y las niñas tengan acceso a la formación artística; unas políticas culturales orientadas a los artistas, a las comunidades; el diálogo de saberes; es decir, todo este planteamiento tan maravilloso de la defensa del patrimonio material e inmaterial, pues yo pienso que vienen cosas buenas y me encantó escuchar que se va a construir sobre lo construido. Entonces, yo siento que estamos realmente en una etapa de cambio y de una transición pacífica, amorosa hacia un vivir sabroso”, dijo Carolina Vivas Ferreira, directora y dramaturga de la compañía de Umbral Teatro de Bogotá.

En ese sentido, incluiremos el eje ‘Colombia en el planeta’, pensando que el arte y la cultura no son ajenos a la preservación de la vida en la tierra. El objetivo del cambio es que cada manifestación cultural contemple la protección de la naturaleza, de los animales, las plantas y los seres humanos. Esta línea de trabajo incluye las relaciones internacionales, es decir, se ampliará y fortalecerá la apropiación de las culturas latinoamericanas como un acto de unión entre los países del Caribe y Suramérica.